Una boda es la culminación de un romance; la realización de un sueño, el comienzo de un proyecto, ... pero sobre todo, para mí una boda es la hermosa historia de un día proyectada desde la ilusión. Y todos los que participamos de ella somos afortunados testigos.
Manuel y Laura conforman una hermosa pareja. Llegaron a mí viejo estudio de Vilamar a inicios de año y tuve la inmensa fortuna de que nos eligieran como sus fotógrafos de boda. Cuando me contaban como iba a ser su boda se les iluminaban los ojos; él con una voz muy noble, y ella dueña de una hermosa y tímida mirada.
La ceremonia se celebró en la Iglesia de San Jacinto, en el mismo corazón de Triana, el paseo por las calles de La Judería y la celebración en uno de los salones de Azahares en Espartinas.
Agradecer la colaboración del equipo humano titular de Manolo Navarro fotógrafos; Rosa, Rocío, Abel y un servidor.
Manuel, Laura, a continuación os dejo vuestra historia; ¿acaso no se trata de un cuento de príncipe y princesa?. Humildes disculpas por la demora pero os garantizo que os merecerá la pena.
Besos, besos y Feliz Navidad.