Ser fotógrafo, no me cansaré de decirlo, es una de las profesiones más afortunadas del mundo y te permite conocer gente que, en tus malos momentos, te ayudan a seguir caminando.
Es el caso de Andrés y Belinda con los que compartimos una entretenida mañana de Domingo de Resurección. Un sol espléndido para un emotivo reportaje preboda.
"Andrés, Belinda; ¿nos casamos el sábado próximo?
Un abrazo y un besito.